Creo que de un tiempo a esta parte la vida me ha sonreído de una manera casi inconmensurable.
Y me siento bien. Y me siento acompañado.
Vagabundo por Santiago creo que he vuelto a añorar esta ciudad. Ya no pateo piedras. Ellas van hacia mi. Y no las evado.
Carpe diem.
Esa es la filosofía.
Y con ello me siento pleno.
He conocido gente increíble el último tiempo.
He recuperado a los de siempre.
Y como diria Tom Jones... esto no es inusual.
Y aún agradezco el paipazo de PP. Gracias sociate.
5 comentarios:
Que alegre el tema...
y que alegria me dio, ver que aun soy la 9.5 y no la 9.3 =)
por otro lado, que alegria que estes bieM
=P
Eso es cerca de mi casa!!!
Sigo con fiebre :(
Me siento asquerosamente mal!
:(
si uno contara el total de sonrisas
que se escapan a diario...
provocaria un ataque
que acabaria con las sonrisas
y acabaria con la vida...
=)
nada de conteos...
solo hay que sonreir...
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como en parte ya sabes...
yo hace algun tiempo estoi feliz y tranquilo
dispuesto a surgir a la mafia
de la normalidad
que lucha en la ciudad por un puesto de trabajo y
un titulo...
me abundo la alegria
en las paredes de mi habitacion
Cuando quieras te pego otro!
Y cuando pueda, compartiremos unas chelas.
Abrazos
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